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martes, 21 de agosto de 2018

North American T-6 Texan (II)

Misión en el Sáhara



  • PINTURAS AL ÓLEO: Precio según tamaño:
  • REPRODUCCIÓN SOBRE LIENZO ENMARCADO:
  • REPRODUCCIONES Y LÁMINAS:

Texan en acción

Como ya dijimos en una entrada anterior referida a este mismo avión, los numerosos Texan recibidos en España fueron el resultado del programa de ayuda militar norteamericana a nuestro país, suscritos a mediados de los años cincuenta del siglo pasado. Sin embargo, las limitaciones de uso de estos aparatos en guerras coloniales, impusieron la adquisición a Francia de los primeros Texan destinados a entrar en combate contra la insurgencia antiespañola del Ifni y Sáhara español.

Resuelto el conflicto del Ifni de 1957-1958, los Texan españoles volverían a ser utilizados en el Sáhara occidental en 1974. En efecto, realizadas las pertinentes adaptaciones para afrontar sus misiones contrainsurgentes, los Texan del 463 escuadrón con base en Gando, fueron pintados de camuflaje y dotados del armamento preciso para el cumplimiento de sus misiones contra-guerrilleras.

Nuestra pintura

Nuestra pintura ilustra dos North American Texan del Ejército del Aire español sobrevolando una patrulla de la Legión en el conflicto saharaui de 1974. Van pintados de camuflaje,como correspondía a las misiones tácticas que desempeñaban estos aparatos en aquella sazón histórica.

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Para saber más

Aeropinakes: Texan COIN



martes, 14 de febrero de 2017

La expedición Penobscot



öleo batalla naval Expedición Penopscot
Óleo sobre papel (50x23 Cm)


En junio de 1779, mediada la guerra de la revolución americana, los británicos desembarcaron en la península de Majabigaduwce en la desembocadura del río Penobscot (actual estado de Maine) y comenzaron a establecer una posición fortificada desde la que proteger el comercio y la población local leal a la Corona. Como reacción, los rebeldes enviaron desde Boston una fuerza expedicionaria con órdenes de “capturar, matar o destruir” al enemigo, formada por unas 44 naves (19 buques de guerra y 25 de apoyo), más de 1000 infantes de marina y milicianos, y unos 100 artilleros. Durante tres semanas se prolongó un duro asedio naval y terrestre que, pese a su superioridad, desembocó en una estrepitosa derrota del bando rebelde, perdiendo todas sus naves y la mitad de sus tropas. Hoy en día la expedición Penobscot, poco conocida para el gran público, se recuerda como el mayor desastre naval de los Estados Unidos hasta Pearl Harbor, 162 años más tarde en 1941.

El enfrentamiento

El 17 de junio de 1779 el general de brigada Francis McLean desembarcó y ocupó la península de Majabigwaduce (hoy Castine) al mando de unos 700 efectivos y comenzó la construcción del fuerte George en el centro de la pequeña península como plaza fuerte para proteger toda la zona. Ante los rumores de la llegada de la expedición rebelde, se preparó para el asedio y dispuso de manera eficaz sus baterías en tierra y las tres únicas balandras de guerra con las que contaba amarradas en un pequeño puerto, de manera que las posiciones se protegían entre sí.
La expedición rebelde llegó a finales de julio, intentando infructuosamente asediar el inacabado fuerte en una serie de acciones que fracasaron debido principalmente a la desastrosa coordinación de sus fuerzas. Los generales Solomon Lowell y Peleg Wadsworth lideraban las fuerzas terrestres, mientras que el jefe de toda la expedición y de la fuerza naval era el comodoro Dudley Saltonstall, posteriormente despedido de la Marina Continental por “ineptitud y fracaso en la persecución eficaz del cumplimiento de la misión”.
El general escocés McLean consiguió mantener a raya a los rebeldes gracias a una fuerza más profesional, mejor adiestrada y, sobre todo, mejor dirigida en sus acciones por un mando competente y una coordinación eficaz de las fuerzas terrestres y navales, comandadas estas últimas por el capitán Henry Mowat. Mientras tanto en el otro bando, increíblemente las acciones militares se debatían y se tomaban decisiones por votación. Los intentos de asedio se prolongaron durante tres semanas apenas consiguiendo causar bajas o pérdidas en las posiciones británicas. No sucedió así en los efectivos rebeldes quienes sufrieron bajas significativas, sobre todo por parte de los marines coloniales que intentaron asaltos valerosos pero fallidos por un apoyo pobre o inexistente de la artillería y la fuerza naval. Particularmente vergonzosa fue la actuación del coronel jefe de la artillería rebelde Paul Revere, posteriormente juzgado por incompetencia y cobardía.
El 13 de agosto de 1779 llegó una flotilla británica de relevo desde Nueva York, compuesta por diez buques de guerra al mando del comodoro George Collier quien inmediatamente atacó a la
flota rebelde. Durante los dos días siguientes la flota norteamericana huyó desordenadamente corriente arriba del río Penobscot hostigada por Collier. Finalmente se produjo el desastre, algunos barcos fueron capturados o hundidos por los británicos y el resto quemados por sus propias tripulaciones, que desembarcaron y se dispersaron por la ribera del río en caótica retirada viéndose obligados a huir a pie e intentar llegar a Boston prácticamente sin municiones ni comida.
Todo el episodio bélico se saldó con unas pérdidas totales por parte del bando británico de sólo 25 muertos, 35 heridos y 26 hombres apresados, mientras que las bajas rebeldes ascendieron a un total de 474 entre muertos, heridos, apresados y desaparecidos, junto con la pérdida de la totalidad de la flota.

Consecuencias

En septiembre de 1779 una comisión de investigación culpó del fracaso estadounidense a una mala coordinación entre las fuerzas navales y terrestres. El general Solomon Lowell fue exonerado de los cargos mientras que el comodoro Saltonstall, declarado culpable de no enfrentarse a las fuerzas navales británicas, fue expulsado de la Marina Continental. El coronel Paul Revere fue acusado de desobediencia y cobardía, dando lugar a su despido de la milicia, aunque posteriormente fue absuelto de los cargos. El general Peleg Wadsworth, quién mitigó el daño organizando la retirada, no fue acusado por el tribunal militar.
El fuerte George y la desembocadura del río Penobscot permanecieron en manos británicas hasta el final de la guerra y únicamente fue evacuado bajo los acuerdos de la Paz de París en 1783. Aun así los británicos volvieron a ocuparlo durante la Guerra de 1812. El veterano general escocés Francis McLean murió de enfermedad en Halifax (Nueva Escocia) en 1781.

Personajes históricos

De todos los que protagonizaron este episodio dos hombres serán, con mucho, los más recordados por la Historia aunque por razones diferentes a su contribución en esta batalla.
El Coronel rebelde Paul Revere, pese a ser considerado por sus contemporáneos como incompetente y cobarde, fue convertido un siglo después en héroe patriótico de la revolución americana. El poeta Henry Wadsworth Longfellow publicó en 1860 el poema épico “Paul Revere's Ride" que retrata con muchos errores históricos un hecho anterior al que nos ocupa: la cabalgada nocturna de un grupo de patriotas para avisar del ataque por mar de los británicos en varias poblaciones de Massachusetts, otorgando únicamente el mérito a Paul Revere, sólo uno más entre los que participaron en la acción.
En el otro lado, el joven teniente escocés John Moore al mando de sus highlanders recibió aquí su bautismo de fuego participando en el rechazo de los intentos de desembarco rebeldes. Moore, ya con el empleo de teniente general, murió y fue enterrado en La Coruña en 1809, durante nuestra guerra de Independencia. También fue inmortalizado por un poema, "The Burial of Sir John Moore after Corunna" del irlandés Charles Wolfe. Moore fue un militar brillante recordado entre otras cosas por contribuir a crear la infantería ligera que con éxito utilizaron los británicos en las guerras napoleónicas. Algunos autores conjeturan que el color verde de los regimientos de fusileros de élite británicos, en contraste con las clásicas casacas rojas, fue inspirado por el uniforme de los marines coloniales a los que se enfrentó Moore en los bosques de Majabigaduwce.

Autor: Pablo Cayetano Garrido

Para saber más:

“El fuerte (capturar, matar o destruir)”, Bernard Cornwell, Edhasa, 2012.


lunes, 22 de junio de 2015

Derribo aéreo sobre Sigüenza


"RATA" vs "HEINKEL-51"


Técnica Digital



Combate I-16 Rata vs Heinkel-51
Derribo aéreo sobre Sigüenza
"El INFANTE -Figuras y objetos militares de colección" nos sugirió la ilustración de un lance aéreo de la Guerra Civil española que tuviese por protagonista a uno de los aviones más emblemáticos de las FARE (Fuerzas Aéreas de la República Española): el Policarpov I-16. Se trataba, en suma, de representar artísticamente la momentánea superioridad técnica que logró el bando republicano con la irrupción en los frentes de combate de este magnífico avión de procedencia soviética. Además, la escena del derribo de un lento Heinkel-51 de la aviación nacional por parte del I-16, lo ubicaríamos en los cielos castellanísimos de la mística y guerrera ciudad de Sigüenza.

Sobre las premisas anteriores hemos elaborado la ilustración que presentamos en esta entrada: un I-16 "Rata" derriba a un Heinkel-51 casi sobre la vertical de la catedral de Sigüenza. El combate podríamos situarlo entre octubre de 1936 y la primavera de 1937. Como puede observarse, el "Mosca", como era conocido en las FARE el I-16, porta sobre su costado el código CM, que era el que correspondía a estos aparatos con independencia del frente en el que actuasen. Por su lado, el biplano Heinkel-51 va identificado con las escarapelas negras y las cruces de San Andrés sobre el plano superior, y luce el camuflaje tricolor que empleaban estos aparatos de procedencia alemana.

Los primeros I-16 llegarían a España en octubre de 1936 para comenzar a sobrevolar los cielos madrileños a partir del 15 de noviembre siguiente. Lograron una rápida superioridad aérea sobre los frentes del Jarama y Guadalajara, pues los anticuados He-51 no eran rivales dignos de consideración. Sin embargo, la llegada de los Me-109 a partir de diciembre de 1936, hicieron que la balanza tecnológica y operativa se inclinase del lado de los nacionales. Igualmente, los técnicamente inferiores FIAT CR.32, demostraron ser una peligrosa amenaza para los "Ratas", debido a que su maniobrabilidad les permitía salir airosos de los encuentros con los más veloces y mejor armados Policarpov I-16.

Se calcula que la aviación republicana recibió unos 280 I-16 "Mosca". A partir de marzo de 1938 llegarían los "Supermosca", unos 120 I-16 del tipo 10, de cabina abierta y cuatro armas. A veinte de éstos últimos se les instaló el motor "Cyclone” sobrealimentado, de origen norteamericano; con ellos se formaría la “Escuadrilla del Chupete”, de Antonio Arias, cuyo objetivo era rivalizar con los Me-109 a gran altitud.

Respecto a los Heinkel He-51, comenzaron a llegar a España a partir del 31 julio de 1936 como parte de la ayuda alemana al bando nacional. Sus éxitos iniciales estaban condicionados por la obsolescencia de sus oponentes (Nieuport 52, Breguet 19 y Potez 54). Sin embargo, la aparición de los netamente superiores Polikarpov I-15 e I-16 supuso un enorme contratiempo para los He-51, que hubieron de ser sustituidos en breve tiempo por los Me Bf-109. Así, los He-51 dejaron de ser empleados en misiones de caza para utilizarse como plataformas de apoyo terrestre. Finalmente, unos 135 Heinkel He-51 actuaron durante la Guerra Civil española.

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jueves, 14 de mayo de 2015

75 Aniversario de la fundación del Ejercito del Aire Español

Primer  Premio de pintura de la Asosciación de Amigos del Museo del Aire

Este cuadro ha recibido el primer premio de pintura concedido por la Asociación de Amigos del Museo del Aire:

Primer Premio de pintura Oleo del 75 Aniversario de la fundación del Ejercito del Aire Español
Oleo sobre lienzo (100x71 Cm)

El año 2014 se conmemoró el 75 aniversario de la fundación del Ejercito del Aire Español. Este comenzó su andadura en el año 1939 como un ejercito separado de la Armada y del Ejercito de Tierra, aunque los primeros aviones militares comenzaron a volar una par de décadas antes, en el año 1911 asignados al cuerpo de ingenieros.

El cuadro muestra una representación de algunos de los modelos que han volado desde entonces, desde uno de los  primeros aviones en servicio en el año 1939, la Bucker Jungmann, hasta el último caza adquirido, el Eurofighter Typhoon. Entre estos modelos se puede ver la evolución desde la hélice hasta el reactor actual. Los aviones  representados son; Fiat CR 32 Chirri, Hispano Aviación HA-1112 Buchón, T-6 Texan, HA-200 Saeta, F-86 Sabre, Mirage F1 y F18 Hornet.

Pintura de aviación



 

martes, 29 de julio de 2014

Oleo de dos F18 Hornet

Arte Militar 

F18


avión militar f18 del ejercito del aire de patrulla
F18 Hornet - Ejercito del Aire
Óleo sobre tabla

Pintura militar de una pareja de aviones F18 del ejercito del aire Español. El óleo fue un encargo de un antiguo piloto.

Si deseas adquirir este óleo original sigue este enlace: Comprar óleo.