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jueves, 29 de octubre de 2015

Centenario del Hundimiento del RMS Lusitania (II)

En esta nueva entrada, artemilitarynaval y la Librería Náutica Robinson, queremos aproximarnos al hundimiento del transatlántico RMS Lusitania desde un nuevo enfoque; la descripción gráfica de la terrible tragedia vivida por los pasajeros y tripulantes del tristemente célebre barco de bandera británica.

RESEÑA DEL LIBRO Lusitania "El hundimiento que cambió el rumbo de la historia."


Ilustración del hundimiento del RMS Lusitania Guerra Mundial

En una entrada anterior ya tratamos los rasgos generales de la desgracia del Lusitania, pintando el momento del torpedeamiento que lo echó a pique. En esta segunda obra, como ya hemos anticipado, nos hemos centrado en la desesperada lucha por la vida de cuantos se vieron fatalmente atrapados en la catástrofe del Lusitania.

En nuestra ilustración, el coloso de lujo y acero se hunde irremisiblemente; el enorme boquete abierto por el submarino alemán precipita en sus entrañas un caudal de agua irresistible. Un nervioso y confuso deambular de hombres, mujeres y niños, con sus idas y venidas desnortadas, neutraliza los heroicos esfuerzos de una tripulación que no acaba de imponer un orden de evacuación.

Lo certero del ataque da poco margen para pensar, pues el barco se sumerge velozmente: en sólo 18 minutos fue engullido por las aguas. La gente se precipita con desigual fortuna a los botes salvavidas o directamente al agua; irónicamente, algunos botes de salvamento se convierten en lanchas asesinas que aplastan, al volcar o caerse al mar desde sus cables de arriado, a los infelices que en ellos lograron embarcar; muchos de los que optaron por el salto directo desde cubierta al mar, morirían ahogados al perder el conocimiento a consecuencia del impacto.

En fin, el coste de esta terrible tragedia se tradujo en la muerte de más de 1.198 pasajeros incluidos 100 niños y 234 ciudadanos estadounidenses. Sobrevivieron 761 personas. Por su lado, la influencia del hundimiento del Lusitania en la opinión pública mundial tendría, más tarde, amplias consecuencias para el desarrollo de la Primera Guerra Mundial.



lunes, 26 de octubre de 2015

El Santísima Trinidad

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Libros recomendados

Hemos recibido un encargo que nos resulta particularmente interesante, se trata de realizar una escena al óleo del mítico navío Satísima Trinidad. uno de los buques de guerra más imponente de cuantos surcaron los mares hasta el siglo XIX. Las dimensiones del cuadro serán de 130x89 Cm, lo que nos dará la oportunidad de recrear el navío con gran detalle, es un reto que abordamos con especial ilusión.



Disponible.


BREVE RESEÑA DEL BARCO

Heroicamente combatió en la Batalla de Trafalgar. El "Escorial de los Mares", apodo con que sería conocido este titán de los océanos, fue botado en La Habana en 1769, llegando a ser el barco más grande y artillado de su época, pues sus cuatro puentes montaron la friolera de 140 bocas de fuego, cifra no alcanzada por ningún otro buque de guerra. Eran tiempos en los que España, potencia mundial de primer orden, podía construir barcos de acuerdo a sus intereses estratégicos, sin limitaciones armamentísticas impuestas por otros. Por ello, y más allá de sus discutibles cualidades marineras, el Santísima Trinidad posee un alto simbolismo político, en algún sentido parecido al del acorazado Bismark, encarnación de la decisión Alemana de recuperar la soberanía política y la libertad estratégica perdidas tras su derrota de 1918.

Como antes hemos dicho, el navío de primera clase de la Armada Española, Santísima Trinidad y Nuestra Señora del Buen Fin, fue botado en La Habana, plaza marítima de primerísima importancia que tenía el privilegio de disponer de los recursos madereros e industriales necesarios para acometer la construcción de esta bestia oceánica. Incidentalmente y como pequeña digresión, podríamos conjeturar si la hazaña industrial del Santísima Trinidad hubiera sido posible sin la gesta de Blas de Lezo sobre el Almirante Vernon en Cartagena de Indias, veinticinco años atrás. Dicho de otro modo, si los ingleses hubiesen apuntalado una base poderosa en el Caribe sin merma de su potencia naval, que es lo que se impidió en 1741 ¿podría haberse construido en Cuba, a base de madera de caoba, el más resistente y poderoso navío de la época?

En fin, volviendo a nuestro barco, lo cierto es que tuvo importantes taras congénitas que, pese a múltiples y sucesivas correcciones, lastraron de por vida el potencial veleros y guerrero que de él se esperaba. Entre otras cosas porque algunas soluciones pasaron por incorporar más cañones en las cubiertas superiores en detrimento de sus ya limitadas cualidades marineras.

Con todas sus defectos, la actividad operativa del Santísima Trinidad fue incesante, participando en todas las campañas importantes que involucraron a la Armada Española. Así, tuvo parte en la guerra naval contra Gran Bretaña en el contexto de los apoyos franco-españoles a las colonias norteamericanas en su lucha por la independencia. En 1782 fue incorporado a la escuadra del Mediterráneo y participó en la batalla del cabo de Espartel. Algo después, en 1797, las luchas revolucionarias y el tratado de San Ildefonso obligarían al Santísima Trinidad a combatir frente al Cabo de San Vicente, acción en la que recibió un duro castigo y a punto estuvo de ser capturado por los ingleses del almirante Jervis: lo salvó el navío Infante don Pelayo del capitán de navío Cayetano Valdés, cuya decisión y energía salvó al "Escorial de los Mares" del difícil trance.

Sin embargo, el Santísima Trinidad será siempre recordado por su trágico y heroico final en la Batalla de Trafalgar, cuando al mando del Brigadier Francisco Javier de Uriarte y Borja acabó sucumbiendo en desigual combate frente a los ingleses. Desarbolado, ingobernable y con las cubiertas regadas de abundante sangre española, el coloso no podía continuar ya su porfiada lucha; siendo imposible e inútil continuar resistiendo, el Santísima Trinidad hubo de arriar bandera y dejarse capturar por los ingleses. Las malas condiciones del barco, que hacía agua por todas partes, le impidieron sortear su última tormenta y, pese al empeño inglés por remolcarlo a Gibraltar, acabaría hundiéndose el 24 de octubre de 1805 a unas 25 ó 28 millas al sur de Cádiz.

A continuación mostramos el proceso de creación artística de nuestra particular visión del Santísima Trinidad. Vamos a utilizar técnicas tradicionales (grafito y óleo) y digitales de un modo integrado y mutuamente complementario.

1.- ESQUEMA Y BOCETO INICIAL

La elaboración del boceto parte de ciertos requisitos establecidos por el solicitante de la obra: el Santísima Trinidad debe verse de través, con el velamen desplegado y la enseña nacional bien visible. Sobre estos presupuestos básicos, pintaremos al barco navegando en una mar movida pero no agitada, a fin de dar un ligero movimiento. Además, el día será claro, para resaltar la lozanía de tan majestuosa construcción naval.



2.- ÓLEO PREPARATORIO

Sobre el boceto anterior del Santísima Trinidad, se ha comenzado el trabajo preparatorio en óleo, para unas primeras aproximaciones cromáticas y volumétricas, tanto de la nave como del mar.

La atmósfera de la escena debe ser clara, lo que no impide romper el cielo con nubes de formas variadas; aún así el aire del cuadro debe transmitir frescura y limpieza.


Pintura del navio Santísima Trinidad Amada Española


5.- PRIMERAS OPERACIONES DIGITALES

Con el rápido trabajo al óleo han sido esbozadas las líneas generales del cuadro. Ahora es necesario digitalizarlo para ir desarrollando, en subsiguientes sesiones informáticas, los pormenores de la obra. Aquí mostramos un estado intermedio de estos trabajos. Por último, y tras nuevas sesiones de desarrollo, llegamos al final de la fase digital, con una composición más compleja, al añadirle otro navío de fondo para dar profundidad, y un redimensionamiento compatible con medidas normalizadas de soportes de lienzo y papel.




jueves, 22 de octubre de 2015

Centenario del hundimiento del Lusitania

En el centenario del hundimiento del Lusitania, artemilitarynaval y la Librería Náutica Robinson hemos querido recordar este trascendental hecho mediante una ilustración original que nos presenta el mismísimo momento en que el trasatlántico inglés recibe el mortífero impacto de un torpedo alemán.
(Escena tomada del libro Lusitania "El hundimiento que cambió el rumbo de la historia."

Ilustración del hundimiento del RMS Lusitania Guerra Mundial

El hundimiento del transatlántico británico RMS Lusitania en el año 1915 está vinculado directamente con la entrada de EEUU en la Primera Guerra Mundial. Este hecho es de vital importancia pues supuso un impulso definitivo a la causa aliada que, a la postre, acabaría inclinando el desenlace de la guerra a su favor. Más de cuatro millones de soldados norteamericanos cruzaron el océano para luchar contra Alemania y las fuerzas del Imperio Austrohúngaro. Al igual que el hundimiento fortuito del acorazado Maine provocó la guerra hispano-norteamericana de 1898, los EEUU utilizaron la tragedia del Lusitania como "casus belli" para su entrada en la guerra del lado de Inglaterra.

Como es sabido, el Lusitania fue atacado por un submarino alemán que acechaba en la costa Irlandesa. Un único torpedo impactó por estribor produciendo una gran explosión que levantó una gran columna de agua. A continuación de esta primera explosión se produjo una segunda, según contaron los supervivientes. ¿Fue causada esta por municiones destinadas a ayudar al Reino Unido en su esfuerzo bélico? está fue la justificación alemana al ataque de este gran buque de pasajeros. En su momento tanto los norteamericanos como los británicos lo negaron pero por el momento no se ha encontrado una explicación creíble que no implique la detonación de munición militar.

Os aconsejamos la lectura del Libro Lusitania, en el que se desentrañan las claves de está historia que cambió el curso de la Primera Guerra Mundial. En el encontrareis respuestas a preguntas como, ¿fue planeada la entrada de EEUU en la Gran Guerra?, ¿el RMS Lusitania transportaba realmente material de guerra? o ¿a que fue debida la segunda explosión?. Al final, según nos cuenta el libro,la realidad es diferente a lo divulgado a través de los medios de la época en que sucedieron los hechos.


ENTRADA RELACIONADA : Centenario del hundimiento del RMS Lusitania (II).




viernes, 16 de octubre de 2015

Precursores del submarino en España

Oleo de los sumarinos españoles Ictinio e Isaac Peral
Óleo sobre liezo (120x70 Cm)


Este año 2015 se cumplen los 100 años desde la fundación del Arma Submarina de la Armada Española. Con ocasión de esta efemérides he querido recordar a los precursores del invento que en España fueron tres; Cosme García Sáez, Narcís Monturiol e Isaac Peral.  No obstante el primeo de ellos habiendo diseñado un prototipo, el garcibuzo, no ha quedado constancia gráfica de que tal invención fuera llevada a la practica (si consta las pruebas de un primer prototipo más sencillo que entiendo no era el Garcibuzo), por lo que no he incluido dicho submarino en la pintura. En esta ocasión, como en la del 75 aniversario del Ejercito del Aire, para contraponer el pasado y el presente he dibujado las máquinas de los precursores españoles, el Ictinio y el Isaac Peral,  navegando con una de la actualidad, el Tramontana de la clase Galerna.

La fatalidad quiso que los tres insignes inventores no consiguieran llevar a buen puerto sus proyectos, y no por falta de ingenio sino mas bien por obstáculos ajenos a sus méritos. Ninguno de los proyectos llego a consolidarse. Don Cosme García según se cuenta hundió su invento en las aguas de Alicante por la frustración de ver que no contaba con fondos para seguir desarrollando su creación. Monturiol creo una empresa para explotar el invento pero fue a la quiebra y por último Isaac Peral tampoco consiguió su objetivo, viendo como incluso con unos resultados muy positivos fue abandonado y saboteado su proyecto.

Cosme García  

Diseño el primer submarino español. El primer prototipo parece que era sencillamente un cilindro con el que fue capaz de sumergirse 45 minutos. El aparato no tenía movilidad mas que en vertical, solo podía ascender y descender. Realizó un segundo diseño mucho más avanzado del que no queda constancia que probara con existo, este es el conocido como Garcibuzo que fue patentado en Francia debido al poco interés de las autoridades españolas.

Narcis Monturiol 

Inventor y político español, creador de los submarinos Ictinio I e Ictinio II. El años 1861 probó su primer prototipo con éxito justo unos meses después de las pruebas que realizó su directo competidor, Cosme García. Curiosamente los dos realizaron parte de sus pruebas en Barcelona y ambos posteriormente volvieron a repetirlas en Alicante.

Monturiol tuvo la idea de crear su submarino al enterarse del fallecimiento de unos recolectores de coral. El objetivo de su submarino era precisamente ayudar en estas labores, mejorando la seguridad de los buceadores.

Isaac Peral

Creador del primer submarino moderno con capacidad militar. Bautizado como submarino Peral, tenía una eslora de 22 m, lo propulsaban sendos motores eléctricos y en superficie tenía un peso de 77 toneladas. Estaba dotado a su vez de un tubo lanza torpedos, tres torpedos y un periscopio. En definitiva tenía los elementos típicos de un submarino actual. 

Las primeras pruebas se realizaron con existo durante los años 1889 y 18890. Sin embargo siendo prometedor el invento no se le concedió permiso para la prosecución de las subsiguientes pruebas, parece que existen motivos fundados para creer que el proyecto fue saboteado desde dentro de la propia administración española.

miércoles, 14 de octubre de 2015

¡Avante España!

Pintura Digital


Disponible.



Soplen serenas las brisas
ruja amenaza la ola,
mi gallardía española
se corona de sonrisas.


Por ti, Patria,
por ti sola,
mi vida a los mares di;
por ti el peligro ofrecí
mis obras y pensamientos.


¡En la rosa de los vientos
me crucifico por ti!


Por tu sagrada presencia,
que nada turba ni empaña,
tiene sus horas la hazaña
y sus horas la obediencia.


El Imperio a España vendrá
por los caminos del mar.


Hay que morir o triunfar,
que nos enseña la Historia,
en Lepanto, la victoria,
y la muerte en Trafalgar.


Soñando victorias, diciendo cantares,
marinos de España, crucemos los mares,
delante la gloria, la leyenda en pos,
debajo las voces de nuestros caídos
y arriba el mandato de España y de Dios.


De España y de Dios.
¡De España y de Dios!



Letra del Himno de la Escuela naval Militar (José María Pemán)


jueves, 8 de octubre de 2015

Blas de Lezo y las defensas de Cartagena de Indias


Inauguración Exposición sobre Blas de Lezo:


Lugar: El Corte Inglés de San José de Valderas-Alcorcón (Madrid)

Fechas: del 7 al 27 de octubre de 2015



El pasado 6 de octubre se inauguró en El Corte Inglés de San José de Valderas (Alcorcón) la exposición “Blas de Lezo y las defensas de Cartagena de Indias”. La exposición, organizada por la Asociación Cultural Blas de Lezo con la colaboración de El Corte Inglés, cuenta con diverso material relacionado con la legendaria figura de nuestro ilustre marino y pretende dar a conocer al gran público la victoriosa defensa de Cartagena de Indias de 1741. Quiere también rendir homenaje a quienes hicieron posible tan importante gesta: Blas de Lezo, Sebastián Eslava y cuantos lucharon en la defensa de la ciudad.

En artemilitarynaval nos hemos sumado a tan relevante acontecimiento, colaborando con la Asociación Cultural Blas de Lezo mediante la confección de mapas, ilustraciones, cuadros y láminas militares que podrán verse y adquirirse en la mencionada exposición. En las fotografías inferiores, Alejandro Vallespín y Gonzalo Moreno, autores de los trabajos de artemiilitarynaval, posan delante de algunas de sus creaciones:








lunes, 5 de octubre de 2015

Exposición Almirante Blas de Lezo (III)


Blas de Lezo: el defensor de Cartagena de Indias



Mixta Óleo-Pintura Digital



Insertamos en esta entrada del blog un nuevo trabajo sobre la épica figura del gran almirante español Don Blas de Lezo y Olavarrieta.

Nacido en la villa marinera de Pasajes (Guipúzcoa), nuestro ilustre marino, de cuerpo menguado por las implacables dentelladas del combate -el Patapalo o Mediohombre habrían de llamarle sus admirados contemporáneos- fue el alma de la encarnizada defensa de la muy noble y leal Cartagena de Indias.

Corría el año 1741 de Nuestro Señor cuando nuestros hermanos cartageneros del otro lado del Atlántico divisaron en la lontananza oceánica una enorme masa flotante que hacia ellos avanzaba. Pronto distinguieron, de entre aquella confusa y gigantesca amalgama en movimiento, la más grande flota de invasión jamás vista hasta la fecha: casi doscientos buques de Su Graciosa Majestad, artillados con dos mil cañones y treinta mil hombres de guerra embarcados, habían sido pertrechados por la Pérfida Albión para desatar un huracán incontenible de fuego y acero en aquellos pacíficos parajes; imponíase despojar a España de su perla más preciada en el Virreinato de Nueva Granada.

Ufano el mando inglés y conocedor de la enorme desproporción de fuerzas, daba por hecha la victoria con el forzamiento de las primeras defensas de la plaza. Sin embargo, la imprudente arrogancia del almirante británico Edward Vernon hubo de humillarse ante la indomable bravura de la milicia española comandada por Blas de Lezo, pues la inesperada y porfiada resistencia que los heroicos soldados europeos y americanos del Rey de las Españas opusieron al invasor, quebrantaron para siempre las ansias inglesas de plantar sus reales en Cartagena de Indias.

En nuestra ilustración, un idealizado Blas de Lezo, dirigiendo la mirada a la flota inglesa en desordenada retirada y con el fuerte de San Felipe al fondo, pronuncia sus célebres palabras de despedida al otrora héroe de Portobelo, almirante Vernon:
"Para venir a Cartagena, es necesario que el Rey de Inglaterra construya otra escuadra mayor, porque ésta solo ha quedado para conducir carbón de Irlanda a Londres"

Proxima exposición (octubre 2015)


Está obra y el resto de nuestro trabajo, en formato de láminas, se podrá ver y adquirir en la exposición que inaugura la Asociación Blas de Lezo.

sábado, 3 de octubre de 2015

Soldados de España en América. -Siglo XVIII-


Exposición Blas de Lezo



Mixta Óleo-Pintura Digital


Láminas disponibles, consulta nuestra Lista de Precios.



Continuando con los trabajos realizados para la Exposición de la Asociación Blas de Lezo, esta entrada ofrece la representación de algunos uniformes de las unidades militares que defendían los territorios americanos de la Monarquía española. Cronológicamente, corresponden a la época de la gesta de Blas de Lezo en Cartagena de Indias, a mediados del siglo XVIII.

Las tres figuras de la lámina superior representan: la más a la izquierda, a los infantes de Marina destacados en La Florida; la central, a los batallones de Infantería de Marina de Cartagena de Indias y, por último, la más retrasada; a un soldado del Batallón fijo de La Habana.

Bajo estas líneas y a la izquierda, se muestra la uniformidad de un granadero del Regimiento de Vitoria. A su derecha, un oficial del Regimiento de Toledo avanza a paso firme hacia su puesto en formación.



Para terminar esta entrada sobre los uniformes de los Ejércitos del Rey de las Españas en el siglo XVIII, y siempre dentro del contexto ultramarino de la época de Blas de Lezo, aportamos esta última lámina, representativa de un oficial abanderado del Regimiento de Aragón, con guarnición en Cartagena de Indias, acompañado de un fusilero, perteneciente a las tropas de Infantería de Marina encargadas de la defensa de los territorios de La Florida.